El sector del reciclaje de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) se halla en un momento de profunda transformación. Desde Europa se está llevando a cabo una decidida apuesta por la transición hacia un modelo de economía circular que garantice la sostenibilidad del sistema productivo, y que permita alcanzar los ambiciosos objetivos que se han establecido a nivel de todos los países de la Unión Europea, tanto a nivel de reciclaje de los residuos, como de prevención de la generación de residuos y de preparación para la reutilización de los aparatos cuando esta resulte posible.
Esta orientación ha propiciado un contexto de rápidos cambios a nivel legal, que en España se han visto concretados en la entrada en vigor del Real Decreto 110/2015 sobre reciclaje de los RAEE, un nuevo marco normativo que exige mayores responsabilidades a las empresas productoras y distribuidoras de aparatos. Responsabilidades que abarcan desde el ecodiseño de los productos, limitando la presencia de determinadas sustancias en los procesos productivos, hasta un creciente protagonismo en la financiación y gestión de los residuos.
Todo ello configura un entorno complejo para dar cumplimiento a los numerosos requisitos, y exige un mayor esfuerzo para alcanzar los objetivos establecidos. Por este motivo, en ECOTIC somos muy conscientes que, en nuestra condición de Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor, debemos ser agentes del cambio para alcanzar el correcto despliegue normativo, para lo que es necesario que logremos desarrollar cuatro líneas de actuación principales.
En primer lugar, asumiendo el compromiso de acompañar a nuestros adheridos en el cumplimiento de los requisitos establecidos, trabajando en la optimización de los procesos y recursos para lograr alcanzar los ambiciosos objetivos de reutilización y reciclaje, y abogando para que todas las empresas del sector cumplan con sus obligaciones establecidas por la ley.
En segundo lugar, debemos poner toda nuestra capacidad de colaboración al servicio de todos los agentes implicados, desde la Administraciones Públicas, pasando por productores y distribuidores de aparatos, hasta los gestores de residuos, para lograr cerrar el círculo en aras de la máxima eficiencia posible, y evitando los flujos irregulares que suponen un importante perjuicio para el medio ambiente y la salud de las personas.
En tercer lugar, es necesario que seamos muy sensibles a la vertiginosa evolución tecnológica que vivimos, buscando las mejores soluciones para dar respuesta a las necesidades específicas de reciclaje de los nuevos aparatos, y lograr con ello recuperar la máxima cantidad de materiales posible para evitar el agotamiento de los recursos naturales finitos.
Y por último, debemos seguir impulsando acciones de sensibilización tanto de los colectivos profesionales como de la ciudadanía en su conjunto, para lograr que todos y cada uno de nosotros tomemos consciencia de nuestra responsabilidad en lograr la transición hacia un modelo de economía circular.
Sólo con una visión holística y a largo plazo del devenir del sector del reciclaje electrónico lograremos establecer un sistema con todas las garantías. Y debemos tener muy presente que de ello dependerá no solamente el futuro del medio ambiente, sino de la sostenibilidad de la economía en su conjunto.
Andrés Martínez
Director General de Fundación ECOTIC
Artículo publicado en el suplemento especial dedicado al sector de los electrodomésticos en el diario Expansión del 30 de junio de 2016