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Nuevas medidas de ecodiseño para impulsar los electrodomésticos sostenibles

La Comisión Europea ha adoptado nuevas medidas de ecodiseño para productos como frigoríficos, lavadoras, lavavajillas y televisores.

En un esfuerzo continuo por reducir la huella de carbono de Europa y favorecer que las facturas de energía sean más baratas para los consumidores, la Comisión Europea ha adoptado nuevas medidas de ecodiseño para productos como frigoríficos, lavadoras, lavavajillas y televisores.

La mejora del diseño ecológico de los productos contribuye a la implementación del principio de ‘eficiencia energética primero’ adoptado por la Unión de la Energía de la Unión Europea. Por primera vez, las medidas incluyen requisitos de reparabilidad y reciclabilidad, lo que contribuye a los objetivos de la economía circular al mejorar la vida útil, el mantenimiento, la reutilización, la actualización, la reciclabilidad y el manejo de los residuos generados por los electrodomésticos.

Tras un proceso de consulta, la Comisión ha adoptado 10 reglamentos de implementación del ecodiseño, que establecen la eficiencia energética y otros requisitos para los siguientes grupos de productos: frigoríficos, lavadoras, lavaplatos, pantallas electrónicas (incluidos los televisores), fuentes de luz y engranajes de control separados, fuentes de alimentación externas, motores eléctricos, frigoríficos con función de venta directa (como los de supermercados y máquinas expendedoras de bebidas frías), transformadores y equipos de soldadura.

La Comisión estima que estas medidas, junto con las etiquetas energéticas adoptadas el pasado 11 de marzo, generarán 167 tetravatios/hora (TWh) de ahorro energético final por año para el año 2030. Esto es equivalente al consumo anual de energía de Dinamarca, e implica una reducción de más de 46 millones de toneladas de CO2 equivalente. Estas medidas se calcula que pueden ahorrar a los hogares europeos un promedio de 150 euros anuales.

Estos ahorros se suman a los alcanzados por los requisitos existentes de ecodiseño y etiqueta energética, que se espera que generen un ahorro de energía anual de alrededor de 150 millones de toneladas equivalentes de petróleo (Mtep) para 2020, aproximadamente equivalente al consumo anual de energía primaria de Italia. Para los consumidores, esto ya significa un ahorro promedio de hasta 285 euros por año en sus facturas de energía domésticas.